Cuando estás escogiendo la acción correcta para invertir, debes escoger las que te dan confianza con respecto a tu estrategia. Por ejemplo, si estás buscando invertir a largo plazo, buscarás compañías que son estables, bien manejadas y que tienen el potencial de crecimiento lento en el futuro.
Por otro lado, si estás buscando cotizar, buscarás acciones que están subvaloradas que cuyos precios probablemente se ajustarán en el futuro cercano.
Además, si estás buscando estrategias más sofisticadas, necesitas buscar acciones cuyos valores se bajarán en el futuro. Tu estrategia también depende de otros factores, como la cantidad de dinero que puedes invertir, tu nivel de riesgo preferido, el plazo de tiempo que estás dispuesto a esperar para ver una ganancia y tu nivel de experiencia.
Por ejemplo, si recientemente te retiraste y estás buscando invertir tus ahorros de vida, es probable que la acción correcta para ti sea una que se mantenga estable que pague dividendos (ej. corporaciones blue chip). Así sería porque no puedes arriesgar perder tus inversiones y necesitas un ingreso mensual.
Al contrario, si tienes 22 años y tienes el resto de tu vida esperándote, puedes escoger acciones que tienen valores que probablemente variarán y te darán ganancias de corto plazo. Los inversionistas usualmente prefieren experimentar y aprender, y normalmente no les molesta arriesgar su capital en el proceso.
Analizando las finanzas
Sin importar cómo es la disponibilidad de tu personalidad y capital, una de las maneras más fáciles de analizar una compañía es ver sus estados financieros. Estos incluyen el de sus ingresos, balances y flujo de efectivo.
Más importante aún, puedes obtener relaciones financieras diferentes de los estados financieros. Estas relaciones permiten que los inversionistas entiendan objetivamente cómo funciona una compañía y compararla con otras.
Algunos números y relaciones importantes incluyen:
Ingresos netos
Los ingresos netos son iguales a las ganancias netas calculadas como ventas menos los costos de lo que vendieron, vender, gastos generales y administrativos, gastos de operación, depreciación, interés, impuestos y otros gastos. Los ingresos netos son una medida importante de la rentabilidad de una empresa y lo que queda para distribuir a sus accionistas.
Margen comercial
Una relación de rentabilidad para medir las ganancias de la actividad de una compañía. Esto representa cuántas ventas de la empresa han creado un margen de ganancia.
En otras palabras, si una compañía tiene un margen comercial de 40%, significa que ha generado $0.40 de ingreso neto por cada dólar vendido. Cuanto más alto sea el margen comercial, más rentable será la compañía.
Relación de deuda a capital
Una relación utilizada para comparar la cantidad de financiamiento de una compañía que viene de préstamos (acreedores) versus capital (inversionistas). Cuanto más alta la relación de deuda a capital, más financiamiento viene de los acreedores; esta puede no ser una buena señal, porque significa que los inversionistas no han invertido en la compañía tanto como prestamistas y puede ser por una falta de confianza de su desempeño.
Una relación de deuda a capital más baja significa una compañía más estable porque el capital no tiene ser pagado a los inversionistas, mientras deudas tienen que ser pagadas al prestamista por pagos regulares con intereses o la compañía sufre penalidades. También, a diferencia del capital, las deudas se tienen que pagar con interés, lo cual es más costoso aún.
Relación precio/beneficio (P/E ratio)
Una relación que mide el precio actual de una acción de una empresa en comparación con sus ganancias por acción. La fórmula de la Relación P/B es el precio de una acción dividido por las ganancias por acción. Permite que los inversionistas entiendan el precio que se está cobrando por acción para recibir un dólar de ganancia.
Hay dos maneras de realizar esta relación; una es usar las ganancias esperadas de una compañía y la otra es usar las ganancias del pasado. Aunque las ganancias esperadas pueden ser una mejor indicador de cómo serán las ganancias, también tiene algunas fallas porque las estimaciones pueden ser incorrectas. Por otro lado, usar las ganancias del pasado es más objetivo, pero puede predecir incorrectamente cómo será el desempeño de la compañía.
En conclusión, la Relación P/B demuestra cuánto el mercado está dispuesto a pagar por una acción en base a sus ganancias predichas o las del pasado. Una P/B alta puede significar que el precio actual de la acción está bajo en comparación con las ganancias estimadas y por eso está desvalorado.
Retorno sobre los activos (ROA)
El retorno sobre los activos es una medida del rendimiento de una compañía en comparación con sus activos. Intenta dar una idea de la eficiencia del uso de activos por parte de una compañía para producir ganancias. Lo más alto que sea el ROA es mejor, porque significa que la compañía necesita menos activos para producir más ganancias.
Sin embargo, esto depende mucho de la industria. Dado que los activos de una compañía son iguales al capital de los accionistas más responsabilidades, el ROA provee una medida de qué tan efectivamente usa una compañía su financiamiento para crear ingresos netos.
Rendimiento de capital (ROE)
Una medida de qué tan efectivamente una compañía usa el capital de sus accionistas para generar ingresos netos. La diferencia entre ROA y ROE es que el ROA toma en cuenta todos los activos (capital + deudas) mientras el ROE sólo toma en cuenta el capital.
Todas estas relaciones nos explican cosas diferentes de una compañía y son muy útiles cuando estás comparando una compañía con las parecida de su industria e intentando entender desempeño y rentabilidad. Al traducir los números de los estados de una compañía a relaciones, somos capaces de comparar manzanas con manzanas entre empresas diferentes.
Pasos para escoger la acción correcta para ti
Algunos de los pasos que puedes tomar para escoger la acción correcta para ti son:
- Definir tu estrategia de inversión: Decídete sobre varias cosas, como si quieres mantener tu acción por mucho tiempo o si la quieres cotizar y vender rápidamente. También decide si quieres que tus acciones tengan un crecimiento bajo, paguen dividendos, crezcan con el tiempo, etc.
- Comenzar pequeño: Escoge una acción y mientras vas ganando más experiencia puedes agrandar tu portafolio.
- Invertir lo que puedes perder.
- Mantenerte informado: Lee sobre los mercados para poder encontrar oportunidades o eventos nuevos que podrían afectar los precios de acciones que quieres comprar. Estar informado te ayudará a ser proactivo en vez de reactivo cuando cambian los precios.
- Estudiar la compañía: Revisa las relaciones financieras de la compañía para mejor entender qué tan buena se maneja, si el precio está sobre o desvalorado, de dónde viene su financiamiento, etc.
- Diversificar: Si vas a comprar varias acciones, es mejor no poner todos los huevos en la misma canasta.
- Mirar los ETFs de la industria en que te interesa invertir para ver una referencia de las compañías prominentes viendo sus activos.
Aunque no hay una fórmula para seleccionar la acción correcta para cada inversionista, puedes seguir algunas de las estrategias que hemos hablado en este artículo.
Si no te da confianza para hacerlo tú, FlexInvest puede servir como una herramienta poderosa para guiarte porque permite que escojas tu nivel de riesgo preferido, experiencia y los portafolios que te interesan.